Casa popular

¿Y si pudiéramos compartir el trabajo de cuidado entre nosotrxs?

Cuidar y educar a los niños, acompañar a lxs jóvenes, apoyar a las personas mayores, lavar, cocinar, limpiar son trabajos cotidianos y básicos para sostener las vidas. Con frecuencia, los cuidados son desigualmente distribuidos, produciendo sobrecarga y pobreza de tiempo de las cuidadoras para el ocio, el estudio y la realización personal. Hoy en día, la falta de infraestructuras públicas y de servicios sociales debe ser suplida por las familias y las redes sociales -sobre todo por las mujeres y disidencias- o adquirida de forma privada a un alto costo.

Pero esto no tiene por qué ser así. En cambio, los centros comunitarios barriales podrían ofrecer servicios de apoyo a las personas mayores, por ejemplo, o actividades de ocio para niños y jóvenes, así como espacios para el trabajo de atención compartida en grupos de padres y apoyo a comedores comunitarios. También el mantenimiento barrial debería estar guiado por las necesidades comunitarias. Todo esto, acompañado de políticas públicas que vuelvan dignos esos trabajos, con altos ingresos y derechos sociales.